domingo, 2 de enero de 2011

TERRORISMO NATURAL

El hombre, se preocupa por el terrorismo humano, que es temible. Pero no le importa el Terrorismo Natural que atrozmente se lleva por delante todo lo que consigue, pisoteando las leyes de los hombres, como le da la gana, sin oír a dioses, dinero, muros, religiones, gobernantes, pólizas, niños y otros; como esta sucediendo cada día en todas partes.
El hombre destruye las zonas protectoras del suelo, el aire y las aguas, arboles, bosques zonas vulnerables son destrozadas por la mano humana, con beneplácito de las autoridades y hasta con apoyo económico y político.
Destrozan para cultivar, hacer viviendas en zonas vulnerables, industrias carreteras, parques de diversión, con o sin permiso.
Todo esto contamina el agua, con agroquímicos, cloacas, basura, residuos industriales. Cuando la madre naturaleza quiere bañarse no puede porque toda el agua esta podrida y ahí es cuando se arr……. Y arrasa con todo.
Si a ella no la respetan, tampoco ella puede respetar a ninguno.
Pero que va, nuestra madre naturaleza, se ríe de este abuso y a su debido tiempo, sin aviso, quita todo lo que le estorba.
Las afluentes del agua, tiene sus márgenes protectoras con vegetación adecuada y malezas, que protegen las crecidas de agua, antes se respetaban, hasta cien metros de terreno protector de los ríos y quebradas como margen.
Hoy no respetan ni las piedras que hay en ellas.
Las laderas son ocupadas para cultivos y viviendas, a pesar del peligro no les importa.
El Terrorismo Natural es beneficioso para futuras generaciones, que serán las victimas de este desorden abusivo.
En estos casos, Dios no oye los gemidos de los humanos, no podemos pensar que si vivimos en la ladera o al borde de un rio, Dios va a estar ahí, cuidando para que el rio no nos ahogue y la ladera no nos empuje, ¿Acaso Dios no nos enseña a ser prudentes y no abusar?
Vemos casas desplomadas o tapiadas por el cerro; invadidas de barro y desechos, debido a las crecidas de las aguas, muertos, damnificados, con hambre y sed de justicia, sin alimentos y todo por no ser precavido y respetuoso con nuestra madre naturaleza.
Todos estos desmanes ocasionan graves problemas al estado y la comunidad, enfermedades, pobreza y crisis, es lo que vivimos y culpamos al tiempo.
El dengue se debe haber destruido, el hábitat natural del mosquito destruyendo el bosque donde el vivía, ahora vive en la sangre humana y se aloja en la casa del hombre y lo enferma.
El Imperio Capitalista invasor y dominante, es otro violador de nuestros suelos con sus cultivos transgénicos (Soya Monsanto) apoderándose de la soberanía agroalimentaria de nuestro pueblo, contaminando el suelo productivo con los monocultivos y los agroquímicos, destruyendo: agua, aire, suelos y variedades ancestrales, tradicionales, propias; adueñándose de la alimentación en general, con patente y derecho de autor.

“La Naturaleza no pertenece a grupos ni naciones. Ella es patrimonio de la Humanidad”.

anadezeo@gmail.com