LA GRIPE PORCINA

Ana Dezeo
La gripe porcina.

El mundo está a oscuras por las noticias: financieras, naturales, hambre, pobreza, salud, epidemias y otras, que son la preocupación y angustia de cada día. Hoy la gripe porcina, recordemos que “aviar” tiene similitud con la porcina, tal vez la “aviar” mutó en la porcina y ésta lo hará en los humanos. Tal vez a los puercos les pasó lo mismo que a las vacas locas, que con el fin de explotar más su leche, le colocaron en los alimentos procesados huesos de pescado, ocasionando el daño neurológico en ellas, causando este problema de locura y muerte de esas infelices vacas. Lo mismo sucedió con la gripe “aviar” donde millares de aves fueron incineradas, toda esta maldad es por la explotación cruel contra estos infelices seres animales, los explotan, los hacen reproducirse a base de hormonas, los maltratan, los hacinan, los torturan y luego los matan y se los comen los humanos; son más feroces que las fieras.
Dijo Dios: Génesis 1-29. “Os he dado árbol que da fruto y plantas que dan semilla y toda hierba, os es para comer”, pero el hombre le gusta más el alimento carnívoro que el alimento vegetal.
Hay prohibiciones para toda la gente, si no hay control del virus, la crisis será espantosa a nivel mundial, hay limitaciones hasta extremas con la gente. Y los puercos, sanos y enfermos ¡Qué! A lo mejor van al matadero y las gentes se los come, ¿no será mejor dejar de comer carnes?, al morir el animal pasa a ser cadáver, congelado o embalsamado, se lo comen, contra su propia salud y conciencia. Pero, la “Sociedad de Consumo” así lo estimula y permite contra la salud humana y con fines de lucro. El virus de gripe porcina está desde el año 1989 haciendo surgir cepas virulentas y dañinas, en 1968 la pandemia fue a causa de mezclar genes en laboratorios. Hay noticias que en un laboratorio de Texas crearon vacunas transgénicas para la influenza porcina y se escapó el virus y se diseminó por todo el mundo, ocasionando esta locura.
No son los animales los dañinos, somos los humanos, a capricho los manipulan y los explotan, violan la ley natural, porque la ley de los hombres es complaciente. Así que estas epidemias son castigo de los Dioses, por la maldad de los hombres; ojalá algún organismo impida la proliferación de palomas en los centros poblados, no permitiendo que les den alimento, pues la gripe “aviar” nos puede invadir con su virus.


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